Situada en el barrio del mismo nombre, al pie del antiguo Camino Real que iba a Mondoñedo, hoy es un paso obligado para los peregrinos que transitan el camino hacia Santiago.
La capilla como el Hospital fue siempre muy humilde. El antiguo hospital de San Lázaro, en el que se atendía a los enfermos de lepra, funcionaba en Ribadeo a comienzos del siglo XIV. Eran patronos del mismo el ayuntamiento y el cura párroco de la villa, los que nombraban al capellán del establecimiento y al mayordomo. Desapareció en el segundo tercio del siglo XVIII cuando en 1766 se fusiona con el hospital de San Sebastián, sin que se conserve en la actualidad ningún vestigio del mismo, más allá de la capilla actual reedificada en el año 1884.
Presenta una construcción rectangular, con bóveda de cañón y cubierta a dos aguas, arco triunfal y capilla mayor rectangular también. Sobre la puerta lateral vemos el escudo de Ribadeo hecho en piedra.
En la puerta izquierda, guardada por rejas, hay un pequeño altar con la imagen de San Lázaro, patrón de los leprosos y los pobres, motivo por el cual a los hospitales en general y en especial a los infecciosos, y más frecuentemente a los leprosos, se les llamara “lazaretos”. El nombre de Lázaro lo relacionamos con la resurrección y con la caridad para los más desvalidos.