Partimos de la histórica villa y puerto de Ribadeo. De noble pasado, alzada sobre una atalaya natural y divisando la ría, conserva un interesante conjunto arquitectónico medieval y moderno. El Camino continúa por una vieja ruta, quizás romana o tardorromana, hasta el final de esta etapa, en Lourenzá.
El primer núcleo después de Ribadeo es Ove. A continuación, el Camino tras una pendiente alcanza Vilela, histórico lugar perteneciente a la parroquia de Covelas. Lugares, todos ellos, en los que fácilmente se capta el sabor de una vida tradicional.
Dejamos atrás Vilela para pasar por los lugares de Celeiros, O Vilar y San Vicente. Llegamos a la parroquia de San Pedro de Arante; allí se encuentra la capilla de A Nosa Señora das Virtudes, del siglo XV, donde hubo un hospital de peregrinos desde el siglo XVI.
El Camino continúa en ascenso y, a través de sendas forestales, se llega al municipio de Barreiros, célebre por sus playas de fina y blanca arena. La primera parroquia que se alcanza es Vilamartín Pequeno. Dejando atrás esta parroquia y su iglesia de San Xoán Degolado pasamos por Vilamartín Grande para llegar a Gondán.
Vilanova es la capital municipal de Lourenzá, alzada en torno al magnífico monasterio benedictino, fundado por el conde don Osorio Gutiérrez (el “Conde Santo”) en el año 969.